viernes, 20 de junio de 2008

¿Alguna vez tuviste un suceso fuera de lo normal?

¿Te han hecho alguna vez esta pregunta? ¿Qué has respondido? ¿Has sido honesto o sólo has querido llamar la atención?

Los relatos sobre experiencias extraordinarias son tan interesantes que han servido para cientos de miles de relatos, libros, novelas, cuentos, guiones cinematográficos y toda clase de narraciones para día de muertos. Y no es nuevo. Quién no recuerda a Edgar Alan Poe, a Mary B. Shelley, a Stevenson, y más actualmente a Stephen King.

¿Están basados en hechos reales o sólo responden a la imaginación inagotable del ingenio humano? En otra entrada ya platiqué sobre Fenómenos Paranormales Cercanos, que en mi familia eran cosa común, al menos antes de que yo naciera, y que yo puedo adivinar que eran causados por el afán de notoriedad, como causa más probable.

Esta pregunta me fue planteada en un foro de Yahoo dedicado a intercambio de información sobre el fenómeno ovni. Y se me planteó porque normalmente mi participación en ese foro era en este tipo de tenores. O sea, desde la esquina escéptica. Mi respuesta está a continuación:

Bueno, ahora que lo mencionas, sí. En una ocasión, cuando tenía como
15 años, me llevé tremendo susto en la noche. Un ruido fuerte, producido cerca de mi cama, me despertó. Lo primero que vi fue la silueta oscura de una guitarra pegada en el techo blanco. Y mi primer pensamiento fue "¡Las cosas están cayendo de abajo hacia arriba!".

Grité con fuerzas llamando a mi mamá. El corazón me latía con mucha velocidad y estaba temblando del susto. Bien, ese es un suceso fuera de lo normal. Pero había una explicación lógica y perfectamente normal. El día anterior había estado jugando en mi cuarto con un balón de basquetbol. Varias veces lo hice botar en el piso con fuerza hasta que rebotara en el techo. Eso de alguna manera hizo que el plafón de yeso que recubría el techo se aflojara y, transcurrido un tiempo, se viniera abajo.

Esa
misma noche al prender la luz me di cuenta que eso que vi como una "guitarra pegada al techo" no era sino una parte del techo sin yeso y que tenía una forma oval, que en mi despertar de improviso "vi" como si fuera una guitarra. Al caer del techo al piso provocó el ruido que me despertó. Conclusión: mi mente me había jugado una mala pasada.

He estado en sesiones de ouija. He estado en supuestas "canalizaciones" con satanás y con dios. He acudido a casas en las que supuestamente "las cosas se movían solas". He estado en cementerios rurales después de media noche, invocando a muertos, espíritus, brujas, demonios y entes del estilo. Por mala fortuna en ninguna de éstas hubo un "contacto" directo conmigo. En las supuestas canalizaciones era la reacción de otros lo que "supuestamente" indicaba la presencia de los entes que mencioné.

Espero no decepcionar demasiado con estos relatos tan sosos y faltos de gracia. Pero así fue como pasaron.


Si alguno de mis lectores desea hacer comentarios a esta entrada, respondiendo a la pregunta inicial, bienvenidos. Prometo hacer una recopilación de las respuestas recibidas.

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