¡Ay! si no hubiese sido por Julio Verne y sus narraciones, como decía el buen Doc (Christopher Lloyd) de Volviendo al Futuro. De no haber sido por él muchos hubiesen pensado que las imágenes de esta entrada representaban, en el peor de los casos, un OVNI.
En el mejor, hubiesen pensado que se trataba de una nave nodriza repleta de extraterrestres en peligro. O bien con las negras intenciones de atacar nuestras sacrosantas instituciones y apoderarse de los dólares de la muy fracturada economía gringa.
Pero no fue nada de eso.
Se trataba de los restos del carguero robotizado de la Agencia Espacial Europea (ESA) reingresando a la tierra en los cielos del Pacífico Sur, bautizado como el célebre autor de ciencia ficción del siglo XIX.
En abril de 2008, Julio Verne realizó el primer viaje automatizado de acoplamiento a la Estación Espacial Internacional (ISS), entregando más de 2 toneladas de suministros sin ningún tipo de asistencia de los controladores humanos.
La nave espacial se convirtió rápidamente en una parte valiosa de la ISS. Varias veces Julio Verne utilizó sus motores para auxiliar a la estación espacial a corregir su órbita, una vez ayudó a esquivar un pedazo de basura espacial, mientras que el espacioso interior de la nave se convirtió en un improvisado dormitorio y "centro de higiene" para la tripulación. Finalmente, Julio Verne se rellenó de basura y el 29 de septiembre fue enviado de vuelta a la Tierra.
No es la primera vez que una nave en desuso se precipita a la tierra. El Skylab de los años 70, al final de su vida útil, se precipitó hacia la tierra, cayendo en el territorio Australiano el 11 de julio (Verne) de 1979. Como dato curioso, el gobierno de Australia multó a la NASA en ese entonces con $400.00 dólares por arrojar basura en territorio público.
Photo credit: Jules Verne MAC observing campaign
En el mejor, hubiesen pensado que se trataba de una nave nodriza repleta de extraterrestres en peligro. O bien con las negras intenciones de atacar nuestras sacrosantas instituciones y apoderarse de los dólares de la muy fracturada economía gringa.
Pero no fue nada de eso.
Se trataba de los restos del carguero robotizado de la Agencia Espacial Europea (ESA) reingresando a la tierra en los cielos del Pacífico Sur, bautizado como el célebre autor de ciencia ficción del siglo XIX.
En abril de 2008, Julio Verne realizó el primer viaje automatizado de acoplamiento a la Estación Espacial Internacional (ISS), entregando más de 2 toneladas de suministros sin ningún tipo de asistencia de los controladores humanos.
La nave espacial se convirtió rápidamente en una parte valiosa de la ISS. Varias veces Julio Verne utilizó sus motores para auxiliar a la estación espacial a corregir su órbita, una vez ayudó a esquivar un pedazo de basura espacial, mientras que el espacioso interior de la nave se convirtió en un improvisado dormitorio y "centro de higiene" para la tripulación. Finalmente, Julio Verne se rellenó de basura y el 29 de septiembre fue enviado de vuelta a la Tierra.
¿Cómo se supo entonces que estas imágenes corresponden a la reentrada de esa nave en la atmósfera terrestre? Desde meses antes se sabía la zona de la tierra por la que sería más probable observar el espectáculo de luces debidas al reingreso de Julio Verne e incluso se llevó a cabo un taller en la NASA, en mayo de este año, para organizar una campaña de observación que sirviese para proporcionar datos de cómo se comportan los detritos espaciales al desintegrarse a su entrada en la atmósfera terrestre.
No es la primera vez que una nave en desuso se precipita a la tierra. El Skylab de los años 70, al final de su vida útil, se precipitó hacia la tierra, cayendo en el territorio Australiano el 11 de julio (Verne) de 1979. Como dato curioso, el gobierno de Australia multó a la NASA en ese entonces con $400.00 dólares por arrojar basura en territorio público.
Photo credit: Jules Verne MAC observing campaign